jueves, 13 de febrero de 2014

En mi defensa

Aun no terminé de aprender a hablar... Es que existen diversos lenguajes y siquiera domino completamente el castellano. Aun escribiendo, que al parecer sería mi fuerte, cometo errores.
Recuerdo que, mientras leía El nombre de la rosa, disentí con Guillermo de Baskerville cuando le dijo a su pupilo Adso que, para ser sabio, debía manejar varias lenguas. Ahora, repensando lo planteado en esta materia, puedo decir que, sin dudas, uno se vuelve más sabio si puede dominar otros lenguajes más allá del escritural y es capaz de comunicarse con sus alumnos de una manera que les sea más atractiva.
En mi defensa, aclaro que no tengo una plena confianza hacia lo escritural y que suelo utilizar otras herramientas para hablar con ellos. Por ejemplo, para explicar una de las definiciones que les doy de cultura, que es la definición gramsciana (la cultura es una espacio de lucha por la apropiación de sentidos), utilizo la música por ejemplo.
Como hemos oído, muchas veces se debate qué es música, qué es buena música... Al estereotipo de “hombre culto” (según la concepción elitista del término cultura) le gusta la música clásica, por ejemplo, y este sujeto podría decir que Los wachiturros o la cumbia villera no es música o, más grave aun, podría decir que ellos no producen cultura. Tras mencionar eso, en la clase, doy play a una grabación que llevo de la Para Elisa de Beethoven, pero interpretada por Pablo Lescano, el líder de Damas gratis. Esta versión podría parecer inclusiva, aunque también muy molesta para quien se suele definir como “culto”. Ahora bien, menciono algo que, tal vez, los alumnos ya saben: que Pablo Lescano se peleó con los premios Gardel por haber nominado a Agapornis en la terna por Mejor Álbum Nuevo Artista Tropical 2013; acá les dejo un video del programa Duro de Domar que trató sobre ese tema; debajo, también les pego la versión del líder de Damas gratis de Para Elisa.




De allí que no solo el “culto” puede ser intolerante, sino también aquellos que pueden ser tildados de “incultos”.
Todo lo mencionado deriva en una definición de cultura que los alumnos no manejan, pero que ya se empieza a problematizar con el ejemplo dado y, en ese momento, dictaré: “La cultura es un espacio de lucha por la apropiación de sentidos” (atribuida a Antonio Gramsci).
(Respecto al dictar, abro un paréntesis paradójico: los chicos están sometidos a los escritural más de lo que yo quisiera cuando dicto (algo que hago poco); ocurre que si hacen lío durante una clase, yo sé que si me pongo a dictar, todos se callan y copian tranquilitos; como crítica, les asocio la palabras DICTAR y DICTADURA, para recriminarles que cuando solo deben copiar, obedecen, porque están educados para copiar y obedecer cuando se trata de no pensar; en cambio, cuando tienen que opinar, que es un proceso más creativo y más libre, y más divertido que copiar, sin dudas, no están acostumbrados a hacerlo.) 
En la cultura, se abren y cierran batallas permanentes sobre definir qué es música, qué música es mejor, qué banda tiene más aguante, qué club tiene la mejor hinchada, sobre si Cristina es buena o es una yegua, etcétera.
Aclaro a los alumnos que Gramsci atribuía estas disputas culturales, en gran parte al menos, a la lucha de clases, pero vale decir que dentro de una misma clase social pueden haber opiniones muy diversas; por ejemplo, dos personas de clase media pueden tener opiniones muy distintas sobre Cristina, sobre el aborto, la existencia de Dios o cualquiera otra cuestión.
En cambio, este ejemplo de Agapornis y Damas gratis nos permite ver una eufemización de la lucha de clases, entre los chetos y los villeros (clase alta y clase baja), que poco tienen que ver con una lucha de clases real para resolver las desigualdades sociales.
Asimismo, el tema de la copia y la creatividad está algo presente en estas disputas: al “hombre culto” le molesta que la melodía creada por Beethoven sea usada por Pablo Lescano; y, a muchos les molesta, que Agapornis sea una banda que solo hace covers.
Sobre la creatividad del músico, es conocido el enfrentamiento que hubo entre Pappo y un DJ Dero en el programa Sábado Bus...



En otro aspecto del tema de la copia, hay artistas que aceptan la copia de sus CDs, como Calle 13, y otros que la enfrentan... 
Volviendo a las formas discursivas para llegar a los alumnos y hacer interesante lo que no lo parece, cito que Martín Barbero señala cuatro características de las culturas juveniles: la devaluación de la memoria, la hegemonía del cuerpo, la empatía tecnológica y la contracultura política. Pues bien, durante alguna clase, el fútbol me permite explicar aspectos de la cultura, de la política y de nuestra historia de manera entretenida, algo que recordé al leer que Baricco destacó el triunfo del equipo sobre el individuo a partir del éxito de la selección de España en los últimos años.
Maradona, Messi, un Mesías, la política, caudillismo... ¿cómo se relaciona todo ello?
A Messi, genio en todo el mundo, muchos argentinos le cuestionan si puede “ganar solo” el Mundial; es una especie de imperativo individualista: si juega en equipo no puede ser tan bueno; es más destacable triunfar si los que están al lado tuyo son todos perros; y ahí surge el mito de que El Diego ganó el Mundial del 86 rodeado de pataduras; más allá de cuanto haya de verdad o mentira en ese mito, lo cierto es que ese mito muestra la fantasía y el deseo de que, en un juego de equipo, la victoria sea lograda por uno solo; por un caudillo, un caudillo que nos salve, sea Maradona, Messi, Néstor o Cristina.
Esta cultura de la delegación hace que uno se lave las manos. Que los cuidadanos se limiten a votar y se considere que eso es democracia; que el "buen ciudadano" se crea que es un buen ciudadano por quejarse de lo que ve en el TV y se lave aun más las manos diciendo: “Yo no la voté”. Así, en ese estatismo, el hombre común es un observador, un copista de la estructura imperante, un obediente del orden establecido, un respetuoso de las desigualdades sociales, en lugar de aceptar su lugar como genio creativo dentro de la historia.

4 comentarios:

  1. Hola interesante el Blog construido por mi colega. Haber voy hacer un comentario al respecto de lo expuesto por mi colega.
    Primero quisiera opinar del grupo "Damas Gratis", el cual lidera Pablo Lezcano, un personaje muy controvertido en el ambiente del espectáculo. Para direccionarlo por el lado de la cultura, me parece que dado el ambiente y el vocabulario que utiliza el grupo desde sus inicios no concuerda con el entorno cultural para nada, si para el entorno comunicativo, dado a la popularidad y masividad que adquirió en toda su trayectoria, de ahí que ahora realice covers de otro genero de música, no significa que lleven consigo una cultura adquirida por la experiencia, si no la veo solamente que lo realizan para llamar la atención y también reflejado a la parte mas comercial. Todo esto solamente lleva a la confusión de nuestros jóvenes adolescentes, que quizás desde el primer momento que empezaron a seguir al grupo e idolatrarlo, no solo se llevan la decepción que ahora el mismo tiene otras aristas si no también que dicen popularmente "se me cayo un ídolo", ya que el mismo cambio la esencia de un día para el otro.
    Como docente en escuelas publicas de la provincia de Buenos Aires, observo y convivo con diferentes clases de individuos, sean chetos , villeros , ricos o pobres, la música expuesta es solo comunicativa, lo importante como docente es tratar de confluenciar los distintos tipos de géneros de la música exhibida por los alumnos, cada estilo tiene cosas distintas, las cuales serán de preferencia adoptar todo lo que sea productivo y evolutivo en lo que implica el desandar y el crecimiento del sujeto. Con esto hago referencia a que si la música es popular y que no agrada a ciertos miembros de la sociedad, a veces da una que otra lección de vida o un mensaje esperanzador, el cual es comunicado a la gran parte de la comunidad, y que muchas veces llama la atención a la gran mayoría.

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  2. Emanuel es muy interesante tu comentario. Durante este verano he leído novelas situadas en nuestra historia del 1880. Muy a mi pesar, me doy cuenta que muchos de nuestros males, algunos comentados por Emanuel, se generaron en esa época y perduran. Hace falta mucha educación para que nuestro país puede salir.
    Los profesores que estamos terminando esta cohorte estamos colaborando en ese cambio.

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  3. Me pareció muy interesante la publicación de Emanuel, en mi poco tiempo de experiencia en el aula en el que comparto con alumnos del último año de secundaria, también he observado y me ha llamado mucho la atención, que en el momento de la clase que les propongo pensar y abrir el debate, no saben como hacerlo, en rangos generales, todo les da lo mismo, dicen que no tienen ganas de pensar, me han llegado a manifestar que no están acostumbrados a ese modo de trabajo,por lo contrario si se les dicta todos acatan lo que se les dice sin objeción, creo que es el modo al que están "acostumbrados" y que se les quiso imponer repetir todo lo que se les diga sin pensar.
    Pienso que, a diferencia de lo que opina Javier, este grupo "Damas gratis" nació en un período social en el que estos representaban a un gran sector de la población que comenzaba a crecer debido a la economía de ese momento, y que también se le daba una gran repercusión en los medios debido a que era un producto que se quiso imponer en la juventud con sus mensajes, el de la vida fácil, en contra de la cultura del trabajo y del esfuerzo.

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  4. Coincido con Emanuel, en cuanto a que despertar la creatividad, participación y debate no es tarea sencilla en nuestras aulas, quizá porque los adolescentes no estén acostumbrados a ser escuchados o sientan que sus opiniones no son tenidas en cuenta por sus docentes, padres, o adultos que lo rodean. Creo que es fundamental respetar las opiniones de todos y aprender a escuchar, que debido a al mundo vertiginoso en que vivimos ya lo hacemos tanto; y ésto me recuerda al blog del compañero que menciona La escuela de la señorita Olga, Hoy nos detenemos a escuchar la naturaleza o al ritmo interno de nuestros pensamientos. Por otra parte, considero que las diferentes manifestaciones culturales son valederas y forman parte de nuestra escuela.

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